miércoles, 29 de abril de 2020

Timón, el pequeño judador



Timón, el pequeño jugador

Timón era un niño muy bajito que tenía diez años. Era tan bajito que en la escuela tenía un pupitre más pequeño que el de los demás, se vestía con la ropa de su hermano de seis años y usaba una bicicleta más chiquitita que las de los niños de su edad.

Nadie sabía por qué Timón no crecía más, pero a él no le importaba porque ser bajito también tenía sus cosas buenas. Tan solo se sentía triste en el colegio, donde todos los niños se burlaban de él.
Nunca querían jugar con él a nada y, en clase, cada vez que la profesora lo llamaba se reían de él porque no llegaba a la pizarra y tenía que subirse a una silla.

Timón muchas veces se sentía mal, porque sus compañeros no se daban cuenta de que él no era el único diferente. Por ejemplo había otro chico que era tan alto que podía tocar los árboles más altos con las manos, otro con unas gafas enormes porque casi no veía y otro tan delgado que tenía que darle dos vueltas al cinturón. Cada uno de los niños tenía alguna característica diferente y eso lo hacía mucho más divertido, pero para los niños lo único divertido era burlarse del pobre Timón.

Un día, mientras estaban en el recreo, Timón estaba sólo comiéndose un bocadillo y, cuando lo terminó, decidió hablar con sus compañeros para preguntarles si querían jugar con él.
- Estamos jugando a las carreras. Tu, como tienes las piernas tan cortitas, no puedes correr rápido – le dijo Manuel, el cabecilla del grupo

Timón se dio la vuelta y volvió a quedarse sólo hasta que, al día siguiente, vio que sus compañeros jugaban al fútbol y se acercó para preguntar si podía jugar con ellos.
- Timón, tu no vales para jugar al fútbol. ¡Contigo en el equipo perderemos seguro! – le volvió a decir Manuel

Entonces, Timón se volvió a marchar solo a una esquina del recreo.

Esa misma tarde, su hermano se encontró una pelota de baloncesto y, cuando llegó a casa, le dijo:
- Timón, ¡Mira lo que me he encontrado! ¿Quieres jugar al baloncesto conmigo?

Timón, que no había jugado nunca al baloncesto, se puso muy contento. Los dos hermanos empezaron a jugar, cuando, de repente, los dos se dieron cuenta de que Timón encestaba todas las pelotas a la primera.

Resultó que Timón tenía muchísima fuerza en los brazos y podía encestar la pelota desde la otra punta de la pista incluso.

Al día siguiente, los niños del colegio estaban jugando al baloncesto, así que Timón, muy contento, se acercó para jugar con ellos.
- ¿Puedo jugar con vosotros? Soy muy bueno encestando la pelota
- ¡Jajajajaja! Un niño tan pequeño como tú no puede jugar al baloncesto – dijo Manuel
- ¡Sí que puedo! Y además lo hago muy bien. Déjame la pelota y te lo demostraré.

Pero Manuel se echó a reír y continuó jugando con sus amigos sin darle a Timón la opción de intentarlo.

Timón volvió a quedarse solo, pero, justo en ese momento, levantó la cabeza y vio un cartel que anunciaba un concurso de triples.

Timón no se lo pensó dos veces. Quería jugar y demostrar a sus compañeros y especialmente a Manuel, que aunque fuera más bajito que los demás no se merecía que le dejaran de lado.

Por fin llegó el concurso. Tenían que lanzar la pelota diez veces y ganaría el que más balones encestara. Todos fueron probando pero nadie lograba hacer un diez. Hasta que por fin llegó el turno de Timón.
- ¡Timón, con tu estatura no vas a encestar ni una! – le gritaban

Pero Timón se armó de valor y lanzó todas las pelotas sin fallar ni una. Fue el primero en conseguir el diez y todos se quedaron boquiabiertos.

Timón ganó el primer premio y demostró a todos sus compañeros que ser bajito no le impedía hacer las mismas cosas que los demás. Éstos se disculparon por su comportamiento y nunca jamás volvieron a meterse con él.



Autora: Irene Hernández

martes, 31 de marzo de 2020

Historia en América y el Caribe


Historia en América y el Caribe

Al igual que los períodos históricos que se explicaron anteriormente, los pueblos de América, y los del Caribe en particular. Desarrollaron sus vidas en diferentes periodos, los cuales puedes ver a continuación:

Precolombino


Descubrimiento y conquista



Este período comprende el estudio de las diferentes culturas que poblaron el continente americano, anterior a la llegada de los europeos, en lo que se conoce como descubrimiento de América, en el año 1492.



La colonia


En este período se instalaron las instituciones de carácter judicial, administrativo, religioso y político, tales como la Real Audiencia, el Virreinato, los cabildos; se construyeron las primeras edificaciones religiosas, como lo fue la Catedral de Santo Domingo, la primera de América.


   Real Audiencia


La Real Audiencia de Santo Domingo o bien Audiencia y Cancillería Real de Santo Domingo en la Isla Española fue el primer tribunal de la Corona española en América, creada en 1511 por una real cédula de Fernando V de Castilla, pero debido a divergencias entre el gobernador Diego Colón y la Corona española, no se puso en funciones hasta que fue restablecida por una real cédula del emperador Carlos V, el 14 de septiembre de 1526.
Esta real audiencia se encontraba dentro de la jurisdicción del Virreinato de Nueva España y su presidente era a la vez gobernador de la Capitanía General de Santo Domingo. En 1776 se le agregó el cargo de regente.
   Catedral Primada de América

La Catedral Primada de América, Catedral de Santo Domingo o Basílica Menor de Santa María de la Encarnación, es una catedral y basílica menor dedicada a Santa María de la Encarnación que se encuentra en la Ciudad Colonial de Santo Domingo, en República Dominicana. Su nombre oficial es Santa Iglesia Catedral Basílica Metropolitana de Nuestra Señora Santa María de la Encarnación o Anunciación. Está ubicada entre las calles Arzobispo Meriño e Isabela La Católica, junto al Parque Colón; quedando su puerta principal al oeste, frente a la calle Arzobispo Meriño, casi esquina Arzobispo Nouel.

Independencia y república

Este período de la historia americana se caracteriza por el nacimiento del sentimiento nacionalista de los habitantes del continente frente a las potencias europeas, que mantenían sus dominios en diferentes lugares del continente.

Surgen en estas etapas las primeras repúblicas, con las cuales se inicia la vida independiente de las naciones americanas.

domingo, 29 de marzo de 2020

Batalla del 30 de Marzo

Batalla del 30 de Marzo

Batalla del 30 de marzo, la defensa continua

La Batalla del 30 de Marzo de 1844 tuvo lugar en Santiago de Los Caballeros y es considerada una de las más importantes para la consolidación de nuestra Independencia Nacional.
Para la batalla del 30 marzo que se produjo en Santiago en el año 1844, los patriotas dominicanos realizaron un proceso de preparación que consistió en obtener dinero para la compra de armas.

Antes de la batalla

Con estos fines la ayuda de Matías Ramón Mella y Pedro de Mena fue muy importante, ya que lograron donativos de muchas personas pudientes de la ciudad. En Santiago, Ciprián Mayol, Juan Luis Bidó, Ramón Bidó y otros dominicanos ayudaron con recursos económicos.
Para esta batalla, la segunda librada luego de la proclama de la independencia nacional el 27 de febrero de ese año, comenzaron a llegar refuerzos desde Baní al mando del coronel Ramón Santana.
Francisco Antonio Salcedo avanzaría hasta encontrarse con los haitianos en Talanquera y Escalante, con el propósito de contener el avance hacia Santiago. Este militar estableció su cuartel general en Escalante, cerca de Dajabón.
Las tropas de Pierrot avanzaron rápidamente y éste tomó a Dajabón el 23 de marzo de 1844. En Santiago existía un clima de terror, a lo que se sumaba la situación creada con la retirada de los ejércitos de Pedro Santana.
Matías Ramón Mella colaboró mucho en la organización de la defensa en San José de Las Matas. Con el riesgo de perder la vida, un comerciante llamado Theodore Stanley Heneken, avisó a las autoridades de Santiago de los Caballeros, sobre la proximidad de la invasión. Conversó con Matías Ramón Mella y le detalló el plan que tenían los haitianos.
El 27 de marzo de 1844, fue llamado por la Junta de Gobierno dominicano el general José María Imbert quien  se hizo acompañar de los oficiales Pedro Eugenio Pelletier, jefe de la línea principal, Archielle Michell, encargado de la Defensa del Fuerte Libertad, el comandante Ángel Reyes, los coroneles Ramón Franco Bidó, José Nicolás Gómez, Fernando Valerio López, los Artilleros José M. López, Lorenzo Mieses, Dionisio Mieses, José Gómez Mallot, Toribio Ramírez, Marcos Trinidad López, entre otros.
El 29 de marzo, al atardecer, el general Pierrot dividió sus tropas. Se acercó a la ciudad de Santiago de los Caballeros con más de 2,000 soldados en cada columna. Antes del amanecer entró a la ciudad un desfile militar de música por el Fuerte Libertad. Las tropas invasoras se atrincheraron en Gurabito.
Antes de la batalla, Imbert hizo un manejo adecuado del terreno donde se iba a combatir.Una parte de las tropas dirigidas por José María Imbert aguardaron en el fuerte “Dios, Patria y Libertad”, frente a la sabana de Santiago de los Caballeros.

Inicio de la batalla

Luego de las tropas de Imbert atrincherarse a la derecha del río Yaque del Norte se dirigió hacia el camino de La Herradura. El enemigo atacó y fue embestido por este en el fuerte “Dios, Patria y Libertad” frente a la sabana de Santiago de los Caballeros.
Los haitianos contraatacaron y fueron rechazados por la artillería dominicana y la fusilería de Fernando Valerio López.
Los haitianos lanzaron un ataque desesperado y fueron vencidos con los cañones del fuerte “Dios, Patria y Libertad” y por la infantería de Fernando Valerio López.
El grupo de los Andulleros de Fernando Valerio López jugó un papel muy importante en el triunfo de los dominicanos, pues aunque muchos de éstos soldados murieron con sus lanzas en las manos, los demás no se amedrentaron y continuaron la lucha.
El general José María Imbert afirmó lo siguiente: “Nuestra artillería le mató tanta gente que renunció a nuevos esfuerzos por este lado del Fuerte Libertad” El enemigo se vio obligado a reconcentrarse en la Sabana. No obstante este triunfo, el enemigo no se dio por vencido y continuó en sus planes de invasión.
Este triunfo fue muy importante para los dominicanos, quienes reafirmaron su fe en la Independencia Nacional lograda el 27 de febrero de 1844.
En esta serie de videos se relatan datos de gran importancia para ampliar los conocimientos sobre esta gesta. Los mismos son fragmentos del documental realizado Víctor R. Valerio, “30 de marzo, La Consolidación de la Independencia Nacional“.

Fuentes: educando.edu.do